Me siento profundamente idiota, impotente y recién, a medida que pasa el
tiempo, tengo la impresión de empezar a entender lo que sucedió y la
tristeza que se esparce por el Ecuador. Sin saber qué hacer, lo único
que se me ocurre es esto, poner una foto con un viejo rayo de sol en
Pedernales, confiando en que volverá.